Frutales

Cultivo de piña: factores que lo afectan y cuidados

Piña

La preparación de los suelos para la siembra de piña se inicia con la limpieza del terreno y la incorporación de los residuos vegetales, para mejorar el contenido de materia orgánica en los suelos. Se puede sembrar por medio de la corona, de los hijuelos o de los retoños.
La forma alargada y acanalada de las hojas se debe a su adaptación para poder acumular el agua de lluvia y del rocío, la cual es utilizada durante la época seca.
La flor de la piña es hermafrodita, y la formación del fruto ocurre sin necesidad de fecundación, lo que se conoce con el nombre de partenocarpia: la planta florece después de un periodo prolongado de sequías; sin embargo, mediante el uso de fitohormonas se puede lograr una inducción floral en cualquier época, logrando una producción programada con base en las necesidades del mercado.
De cada planta se obtiene una sola piña, que es una fruta compuesta o una fruta múltiple, porque lo que en realidad es un fruto individual es cada una de las secciones hexagonales que la componen.
La piña es el segundo cultivo tropical de mayor importancia mundial después del cambur, aportando más del 20% del volumen total de frutas.
70% de la piña que se produce en todo el mundo es consumida como fruta fresca en el país que la produjo.