Pollos de engorde: crianza y control de temperatura

El control de temperatura en aves es de gran importancia; principalmente en Latinoamérica, donde existe una extensa variación climática que obedece a la altura sobre el nivel del mar y la posición geográfica. De la misma manera, existen otras fuentes de variación climática, las cuales no son objeto de discusión en este artículo.

Por el contrario, se intenta mencionar o dar una visión general de algunas estrategias de manejo que permiten controlar; o más bien mejorar las condiciones del ambiente productivo para obtener confort térmico en las aves de producción.

En este sentido, manejos que tienen que ver con el recurso animal, cambios ambientales pre o post eclosión y control del microambiente productivo, son abordados en los párrafos siguientes.

Control de la temperatura en la producción de  aves

La salud de las aves y, por ende, la productividad depende entre otros aspectos, de la temperatura de los galpones. De hecho, es común que cuando las condiciones ambientales dentro del recinto donde las aves producen no son correctas, se presenten afecciones respiratorias y enfermedades digestivas.

En tal sentido, la temperatura ambiental óptima en la mayoría de las aves de interés zootécnico se ubica en el rango de 18 – 24 ºC; así que una manera fácil y efectiva de evaluar el efecto de la temperatura en las aves es observar su comportamiento. Sin embargo, lo aconsejable es colocar termómetros dentro de la nave de cría.

Asimismo, los termómetros deben colocarse a una altura que facilite su lectura. También, deben en lo posible instalarse lo más cercano a la altura de las aves, y debe considerarse el flujo de aire en galpones cerrados para no obtener lecturas falsas.

Zona de confort térmico de las aves

Un aspecto que debemos considerar es la zona de confort térmico o termoneutralidad de las aves. Por eso es definida como el rango de temperatura ambiental en el cual las aves son capaces de regular este mismo indicador corporal con el mínimo esfuerzo físico.

Dado que esta zona coincide con el rango ideal, por ello, cuando desciende o aumenta, causa algunos efectos o cambios en el comportamiento de las aves; lo cual impactará de manera negativa los rasgos productivos. A continuación, la Figura1 presenta un ejemplo para gallinas ponedoras.

Figura 1. Rangos de temperatura y su efecto en gallinas ponedoras. Fuente: Lera (2021)

A pesar de que muchos productores agropecuarios no consideran la humedad relativa, ésta es de particular importancia; sobre todo en monogástricos (gallinas, pollos, cerdos, etc.), cuya capacidad de disipar calor es reducida por la ausencia de glándulas sudoríparas.

Ciertamente, la humedad relativa expresa la capacidad de retención de agua del aire. Por lo tanto, en el caso de las aves, las cuales intercambian calor con el medioambiente principalmente mediante el mecanismo de hiperventilación (jadeo); entonces es necesario que la misma sea baja.

Relación entre la temperatura y la humedad relativa

Como se mencionó anteriormente, la humedad relativa tiene alta importancia en sistemas de producción avícolas. Si vamos más allá, realmente el equilibrio entre la temperatura y la humedad relativa es lo que define, en cierta manera, la zona de confort de las aves.

Es de resaltar que la literatura expresa que la interacción entre estas dos variables ambientales, es decir, la sumatoria de ambas debe ser cercana 90. Así, valores superiores a este promedio coinciden con reducciones del consumo de alimento; mientras que, cuando la temperatura baja, ocasiona aumento del consumo de alimento balanceado (Figura 1). En todo caso, ambos extremos conducen a reducción de la producción, incluso hasta la muerte.

Densidad de aves y temperatura corporal

Es lógico pensar que, cuando aumenta la densidad de aves en el galpón; es decir, el número de aves por metro cuadrado, incrementa la temperatura corporal de estas. En realidad esto obedece a que cada ave produce calor metabólico, por tanto, la sumatoria del calor producido dentro de la nave de producción es mayor.

Empero, todo no termina aquí, al haber más animales por área, queda menos espacio para disipar el calor corporal de cada ave; o lo que es lo mismo, se detiene o se reduce la ventilación para cada pollo.

Cabe destacar que algunas investigaciones han encontrado que un incremento de la densidad en pollos de engorde de 0.2 pie cuadrados/ave; en efecto, deriva en un aumento de la temperatura corporal de hasta 1 ºC.

Ventilación natural en el control de la temperatura de aves

La ventilación es clave para el control de temperatura en aves, así como los gases nocivos producidos dentro del galpón de cría; de hecho, esta aseveración es particularmente importante en pollos de engorde.

Ahora bien, bajo este sistema, se pretende aprovechar las corrientes de aire del medio ambiente circundante para que entre al galpón; y produzca una recirculación o recambio del aire caliente que se encuentra dentro del mismo.

De manera que este sistema es efectivo cuando las condiciones del medioambiente que rodea al galpón son similares a lo interno; por lo tanto, simplemente se basa en abrir o cerrar las cortinas, puertas y/o paneles en respuesta a la temperatura interna del galpón. Siempre obedeciendo a las condiciones climáticas, si es caluroso o frío, se permite mayor o menor abertura de las cortinas y varía la altura de ésta (Figura 2).

Figura 2. Esquema de ventilación natural de los galpones bajo dos situaciones: clima cálido y clima frío. Fuente: Aviagen (2009)

Adicionalmente, la ventilación natural requiere control de las cortinas durante las 24 horas; por ello, aunque es factible hacerlo manual, es preferible colocar sistemas automatizados con timers y/o termostatos que permitan el accionar de los sistemas sin la intervención del hombre.

Ventilación forzada con extractores para el control de la temperatura de aves

El control de temperatura en aves mediante ventilación forzada se basa en la utilización de extractores ubicados en los extremos del galpón; con la finalidad de llevar aire a lo largo de este, permitiendo así mayor eficiencia en la tasa de recambio de aire, y una ventilación más homogénea en el mismo.

En la actualidad se usa el sistema de presión negativa, que no es más que colocar los extractores en un extremo del galpón para crear vacío dentro de este, y que el aire nuevo entre por los laterales de la nave. También se usó (hoy no es muy frecuente), el sistema de presión positiva, en el cual se colocaban ventiladores en el extremo de la instalación obligando al aire viciado a salir de la edificación por empuje (Figura 3).

Para tener éxito en este sistema, es preciso sellar completamente el galpón para poder tener control de los sitios por donde entrará en aire de recambio. Dentro de este sistema se distinguen tres tipos:

1. Ventilación mínima: Se utiliza un reloj o timer para encender y apagar el sistema, muy útil en clima frío y para aves pequeñas.

Figura 3. Esquema de ventilación mínima de galpones avícolas.

2. Ventilación de transición: Es controlado por termostatos, se activa con calor excesivo; sin embargo, está configurado para no aplicar aire frío directamente sobre las aves (Figura 4).

Figura 4. Esquema de ventilación de transición de galpones avícolas.

3. Ventilación de túnel: Especial para clima caluroso y con aves grandes que producen elevada cantidad de calor metabólico, funciona con termostatos (Figura 5).

Figura 5. Esquema de ventilación de túnel de galpones avícolas.

Enfriamiento evaporativo para el control de temperatura en aves

Otra estrategia para el control de temperatura en aves es el enfriamiento evaporativo. En tal sentido, la literatura señala que el hecho de evaporar un galón de agua al aire elimina 8700 BTU, por lo cual lo consideran una estrategia muy efectiva.

Por lo tanto, este sistema utiliza boquillas ubicadas en la parte alta del galpón o paneles evaporativos que instalan en el lugar opuesto de los extractores en sistemas de ventilación por túnel.

Técnica de aclimatación para el control de temperatura en aves

Mucho se ha investigado al respecto tanto en gallinas ponedoras como en pollos de engorde; así esta técnica consiste en criar las pollitas (os) en fases iniciales, bajo condiciones de altas temperaturas.

De acuerdo a un estudio se demostró que someter las pollitas a temperaturas altas durante 14 días en la fase inicial de cría; de hecho, producía una reducción hasta de 2 ºC en la temperatura corporal de las aves en su vida posterior al tratamiento (Holik, 2009).

Por otra parte, experiencias llevadas a cabo con pollos de engorde han demostrado que someter a los pollos a tratamientos con calor desde el tercer día de nacimiento induce la resistencia a las altas temperaturas; sin duda, situación que se expresa en descenso de la tasa de mortalidad (Gráfico 1).

*Todos los pollos se criaron a 39 ºC durante los primeros tres días, luego se ajustó la temperatura a 25, 32 o 39 ºC en el día 7, para posteriormente ser criados entre 25 y 28 ºC hasta el día 50, punto en el que se aplicó golpe de calor (40 ºC, durante siete horas). Gráfico 1. Efecto de la temperatura de cría en la temperatura corporal y mortalidad de pollos de engorde.

Transmisión del comportamiento de temperatura corporal baja

Otros estudios han demostrado que reproductores con temperatura corporal baja transmiten el comportamiento a su progenie reduciendo las pérdidas por mortalidad. En el Gráfico 2, se observa menor mortalidad para pollos descendientes de progenitores con temperaturas corporales bajas vs sus pares de temperaturas corporales altas.

Gráfico 2. Mortalidad para pollos descendientes de reproductores con temperaturas corporales altas y bajas.

Manejo nutricional para el control de temperatura en aves

Algunas estrategias de manejo se han utilizado para bajar la temperatura corporal en aves, la adición de electrolitos al agua, ha bajado la temperatura corporal de las aves en 0,11 ºC; aunque la reducción en magnitud no es muy pronunciada, si se observa una disminución acentuada de la mortalidad por causa del stress calórico (Gráfico 3).

Gráfico 3. Variación de temperatura corporal y mortalidad en pollos de engorde bajo distintos manejos nutricionales.

De igual forma, algunos estudios llevados a cabo en Venezuela, han demostrado que diversas estrategias de restricción alimenticia en horas calurosas; en efecto, han devenido en reducciones de temperatura corporal de pollos de engorde de hasta 0,5 ºC, así como la disminución de mortalidad en el orden de 55%.

Control de temperatura de aves ¿Factible?

Existen diversas estrategias comprobadas para controlar la temperatura de los pollos de engorde y gallinas ponedoras. Ciertamente dichas soluciones parten de los intentos de selección de reproductores tolerantes al calor y, por supuesto, de su descendencia.

Ese otro orden de ideas, la aclimatación mediante tratamientos térmicos tempranos también es una opción; para después pasar al control del microambiente productivo, mediante ventilación natural o forzada.

Otras vías pasan por agregar electrolitos a la dieta o el agua y manejos restrictivos de la alimentación en horas calurosas. De esta manera, todas las estrategias mencionadas persiguen reducir la temperatura corporal de las aves y reducir las pérdidas por mortalidad.

Compilador: Rafael Galindez Dr. en Ciencias Agrícolas, mención Genética Animal

Referencias consultadas

Abudabos, A.; Samara, E.; Hussein, E.; Al-Ghadi, M.; Al-Atiyat, R. 2013. Impacts of stocking density on the performanceand Welfare of Broiler Chickens. Italian Journal of Animal Science 12: 66 – 71.

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Language_Docs/Spanish_TechDocs/Aviagen-Manejo-Ambiente-Galpn-Pollo-Engorde-2009.pdfConsultado: mayo, 2022.

De Basilio, V.; Bastidas, H.; Salas, C.; Bastianelli, D. 2010. Effect of body temperature of heavy broiler breeders on resistance.XIIIthEuropeanPoultryConference. Tours, Francia. 23 – 27 agosto. Disponible: https://agritrop.cirad.fr/556545/1/document_556545.pdf. Consultado: mayo, 2022.

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Farfán, C. 2012. Uso de Minerales para Reducir el Estrés Calórico en Pollos de Engorde en Ambiente Tropical de Venezuela. Editorial Academia Española. LAP LAMBERT Academic publishing GmBH& Co. Kg. Alemania. 57 p.

Holik, V. 2009. Management of laying hens minimize heat stress. Lohmanninformation 44(1): 16 – 29.

Lera, R. 2021. ¿Cómo mantener la temperatura ideal en mis galpones? Colaves. Disponible: https://colaves.com/temperatura-y-clima-adecuados-en-la-avicultura/. Consultado: mayo, 2022.

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