La creciente inestabilidad política y económica en Irán comienza a repercutir en los mercados internacionales, provocando un alza significativa en los precios de productos clave como aceites vegetales, frutos secos y fertilizantes.
Irán, uno de los principales exportadores de pistachos, azafrán, aceite de sésamo y urea —un fertilizante nitrogenado esencial— enfrenta bloqueos logísticos, restricciones comerciales y una caída en su capacidad productiva debido a las sanciones internacionales y las tensiones internas.
El precio del pistacho iraní, que representa más del 50% del comercio mundial, ha subido un 18% en las últimas semanas. Importadores europeos y asiáticos buscan proveedores alternativos, lo que ha generado presión sobre otros mercados como Turquía y Estados Unidos.
La escasez de aceite de sésamo y cártamo ha elevado los precios hasta un 12% en mercados mayoristas. Restaurantes y fabricantes de alimentos procesados ya reportan ajustes en sus costos operativos
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