La Comisión Europea presentó una propuesta para aplicar de manera provisional la parte comercial de los nuevos acuerdos con Mercosur y México, mediante pactos interinos que serían reemplazados posteriormente por tratados generales con contenido político, una vez que sean ratificados por los 27 Estados miembros de la Unión Europea.
La iniciativa busca acelerar la entrada en vigor de los beneficios económicos de ambos acuerdos, evitando los prolongados procesos de ratificación nacional que suelen retrasar su implementación.
Según la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, estos tratados representan “hitos importantes para el futuro económico de la UE”, al facilitar la reducción de aranceles, fomentar nuevas asociaciones y generar oportunidades de negocio para empresas europeas.
El acuerdo con Mercosur —que incluye a Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay— crearía la mayor zona de libre comercio del mundo, abarcando un mercado de más de 700 millones de consumidores. Por su parte, el pacto modernizado con México ampliaría el acceso a materias primas esenciales y eliminaría casi todos los aranceles sobre exportaciones agroalimentarias.