Acuicultura: Tipos, reciclaje de nutrientes y sus beneficios

Durante las últimas décadas la producción mundial de especies procedentes de la acuicultura ha ido en continuo crecimiento, constituyendo uno de los rubros más importantes para la seguridad alimentaria.
Este crecimiento viene dado principalmente por el cultivo de especies alimentadas como peces y camarones, por lo tanto se genera una importante cantidad de desechos que son liberados en el cuerpo de agua donde son cultivados.
Como consecuencia las aguas de cultivo terminan cargadas con altos contenidos de nutrientes y materia orgánica, dando lugar a afloramientos de algas, así como el agotamiento del oxígeno.
Para mitigar los impactos de esta actividad sobre el medioambiente es necesaria la búsqueda de prácticas de acuicultura responsable.
De allí surgen alternativas como la acuicultura multitrófica integrada (AMTI) caracterizada por ser un tipo de acuicultura ecológica, ambientalmente benigna, diversificada y rentable.
La acuicultura multitrófica integrada todavía está en su infancia, pero presenta grandes perspectivas para convertirse en la acuicultura del futuro caracterizada por una mayor producción y diversidad de productos, también promueve una mejor calidad del medio ambiente, sostenibilidad económica y social.
Asimismo, los beneficios ambientales en conjunto con la reducción de costos en el tratamiento de efluentes; mientras se produce biomasa sin gastar en piensos comerciales, es una gran ventaja económica.
No obstante, las grandes oportunidades vienen acompañadas de grandes desafíos e identificar las especies más adecuadas para combinar en los sistemas acuicultura multitrófica integrada, junto con la necesidad de crear modelos para mejorar las condiciones para que el co-cultivo genere los ingresos óptimos, requerirán una investigación considerable.

Bioseguridad: qué es, medidas y protocolos en acuicultura

Las enfermedades en la acuicultura constituyen un aspecto que pocas veces se puede evitar en este sistema de producción, convirtiéndose en uno de los principales retos a resolver para el desarrollo de la industria.
De manera que la mortalidad de los organismos en cultivo ocasionada por agentes patógenos; así como el impacto económico y social que esto representa, obliga a buscar nuevas alternativas de manejo de los organismos y la prevención de enfermedades infecciosas.
Actualmente existe una creciente preocupación relacionada con la inocuidad de los alimentos; además del impacto que representa para el medio ambiente el uso de antibióticos y compuestos químicos en las labores acuícolas.
De ahí surgieron las prohibiciones para la importación de alimentos con residuos de dichos compuestos.
Por consiguiente es necesaria la aplicación de medidas de bioseguridad para controlar o eliminar la amenaza o el peligro de enfermedades en las instalaciones acuícolas; disminuyendo así los efectos negativos que se presenten.
Las medidas de bioseguridad en acuicultura son esenciales para controlar y prevenir las enfermedades infecciosas y sus devastadoras consecuencias económicas.
Es por ello que los elementos clave de la bioseguridad en la acuicultura son: una fuente fiable de organismos, un diagnóstico temprano de enfermedades, la prevención de patógenos y las mejores prácticas de manejo.
Asimismo los planes de bioseguridad bien estructurados mejorarán la salud animal, la producción acuícola, la economía regional y nacional.
La bioseguridad es un esfuerzo de equipo, de responsabilidad mutua y además es un proceso dinámico que tiene que ser constantemente reevaluado y seguido.

Mejillón: beneficios, características y su cultivo

El cultivo de mejillón es una de las actividades acuícolas más importantes y rentables en todo el mundo. La alta rentabilidad comparada con el costo de producción, hacen que esta actividad crezca constantemente.
En la actualidad el mayor productor mundial es China con una producción anual que supera las 500 mil toneladas de mejillones.
Son ampliamente conocidos los usos de los mejillones en la gastronomía mundial. También son empleados como bioindicadores para controlar la salud en ambientes marinos.
Es un alimento muy completo, entre sus componentes están presentes las vitaminas A, E y B. Minerales como el zinc, calcio y sodio también están presentes en el mejillón.
Especialistas recomiendan el consumo de mejillones en personas con deficiencias alimenticias.
La cría de mejillones puede darse de tres formas: mediante los sistemas de estacas, suspensión y fondo.
Los métodos de cultivo están especialmente diseñados para la cría de mejillones en costas protegidas de fuertes vientos y desembocaduras de ríos. Conviene ubicar el cultivo en bahías con mareas bajas.
El arrastre de sedimentos producto de lluvias o corrientes fluviales pueden afectar la respiración de los mejillones.
Para mantener condiciones óptimas en los mejillones se debe conocer la disponibilidad primaria de algas y microorganismos. De esto depende su alimentación.

Acuaponía, la simbiosis perfecta entre el cultivo de plantas y la cría de peces.

La Acuaponía se viene convirtiendo en una tendencia creciente en la agricultura del siglo 21. La acuaponía consiste en una combinación de acuicultura con hidroponía, donde se integran ambos sistemas, generando como resultado un modelo de producción que podemos describir como “peces que alimentan plantas”. Los modelos agrícolas integrados son las nuevas tendencias, donde se Acuaponía, la simbiosis perfecta entre el cultivo de plantas y la cría de peces.